- ¿Qué se puede pensar de un pacto?

Le pregunté a mi silencio, rodeado de soledad y un viento fresco despues de haber caido una brisa del cielo.
 - Quizá sea solamente para gente loca. Gente que hace las cosas por hacer. - Me dije en un tono de decepción.
Levante mi rostro hacia el horizonte en la puesta del sol; los rayos rojizos vislumbraban mi rostro, pequeñas aureas y pigmentos de diversos colores adornaban el cielo, de un lado un hermoso arcoiris aparecia de entre las nubes, un pacto eterno.
- Al parecer es algo muy importante. - Me volvi a decir tratando de cubrirme el rostro por la luz del sol.
Me diriji hacia la sombra, en donde me encontré con un par de canarios y me volví a preguntar:
 - ¿Que se puede pensar de un pacto?
Los pajarillos estaban cantando. Disfrutando de la tierra mojada y húmeda, despreocupados por el mañana, ellos solo reían y disfrutaban del día, sabiendo que en un momento a otro su destino puede cambiar, pues, alguien podría llegar y los puede atrapar, enjaular y vender como pequeñas mascotas, pero eso a los pajaritos nos les interesaba.
 - Puede ser que solo sea para personas que quizá tengan algo en común. - Me dije nuevamente desconsolado.
Al mirar mi reloj, pude observar que las manecillas se habían detenido, una sobre la otra y pude saber que el tiempo es un regalo de la vida, un pacto más que eterno.
Fui y me senté en una banquita, con mi semblante algo triste, me volví a preguntar.
 - ¿Qué se puede pensar de un pacto?, de un pacto de sangre...
- Quizá solo sea para personas locas, o personas realmente enamoradas, o personas que aman incondicionalmente, o personas que pactan con ellas mismas por algo o alguien...
Y entonces mi rostro cambio y se lleno de alegría por completo al ver un pedazo de madera, lo que me hizo recordar el más grande pacto de amor hecho jamas por el hombre. Un pacto más real que el que los humanos somos capas de hacer, pues nosotros somos capaces de "romper" sin ninguna importancia el pacto, mientras que en el cielo, un pacto es lo más preciado que existe en esta naturaleza, en esta vida, un pacto es y da vida.
Con mis ojos sollozando de alegria al saber que existia alguien que de verdad me amaba tanto, tanto sin poderlo yo comprender, me dije entre sonrisas y lagrimas:
 - Porque un pacto no se puede romper, si se rompe no se hizo con pasión, con un mismo amor...
Me levante y me retire de este mi sueño.