Voces

Susurran voces en mi mente, voces muy reales, vivas, se escucha el palpitar de mi corazón, se siente la velocidad la impaciencia de mi sangre por recorrer todo mi cuerpo. Se escucha la lluvia derramarse por las ventanas, se escucha el silencio. Mi silencio.
Susurran voces en mi mente, voces muy reales, vivas. Qué cuando comienzo a escuchar mi imaginación se dispara y denoto que se conectan eh invaden mis emociones, mis sentidos y todo se vuelve en un completo trauma, en una fuerte angustia.
Callado me mantengo vivo, nadie sabe lo que escucho, lo que
pienso, lo que siento; mucho menos lo que soy capaz de hacer.
Una buena reputación lo puede todo. Mientras todos visualizan a alguien feliz, alegre, nadie se imagina lo que es en realidad, lo que soy en realidad. Aquella personalidad que emana de mi interior se estaciona en zonas muy específicas de mi cerebro en donde me pueden hacer daño, de donde siento muchas veces no poder salir ileso.
Ya son varios días y meses en la misma situación, me puedo
levantar como si no hubiese pasado nada, como si quien
gobernara mi vida fuera una de las voces, una melódica sinfonía.
Así como las plumas se deslizan en el viento y no encuentran un lugar fijo para quedarse ahí, así es mi mente, mi ser.
Una voz le dice a la otra; -me toca, una de ellas toma ventaja y
comienza a crear imágenes y hace que las cosas sean muy reales y me hace sentir débil y lo soy.
Estoy encerrado en una casa habitación en donde solo escucho voces que atrapan mi alma y escupen mi ser.